lunes, 24 de noviembre de 2014

Ermita de las Ventosas y Caserras del Castillo (22/11/2014)

Hemos elegido un día excelente para terminar el libro de José María Fuixench Naval, "Santuarios Rupestres del Alto Aragón". 

El otoño ha retrasado su entrada tanto en temperaturas como precipitaciones, así que ¡aprovechemos!

Vamos a visitar Nuestra Señora de Las Ventosas en Torres del Obispo, y Santa María de Caserras. Coincide que estan relativamente próximas por lo que, en una jornada, se pueden ver las dos.

Hace unos días, en la presentación del segundo libro de Cristian Laglera sobre despoblados, comentó una especial querencia por Caserras del Castillo. También Antonio García Omedes le dedica un espacio en su página.

Aparcamos en La Tosquilla, una especie de pardina perteneciente a Torres del Obispo, y comenzamos a caminar por pistas agrícolas. En todo el trayecto, unas indicaciones van guiando al caminante de forma constante. de otra manera, los distintos cruces harían complicada la progresión.

Al poco de arrancar, en la lejanía se ve el despoblado de Castarlenas. Sorprende lo enorme de su parroquial. Este sitio se queda apuntando para visitarlo próximamente.


En cuatro escasos kilómetros, llegamos a destino.



Llama la atención la ubicación de la Ermita, pegada a la roca, aprovechando la visera del abrigo.



Se nota que es un lugar de romerías, explanada, barbacoa para asar carne (auténtico fin de estas reuniones), y a base de "buenos tragos", pasar un día de asueto complaciendo a la virgen, o santo, con la advocación que toque en cada lugar.

Pongo la ruta aunque, como digo, está perfectamente señalizada, pero, por si acaso se pierde alguna tablilla.



Y ahora el plato fuerte del día. Caserras del Castillo. Nos desplazamos en coche hasta Estaña. De allí sale, también un recorrido circular, bien señalizado, para visitar las lagunas de Estaña (estanque, estañ, estaña) 


Unos observatorios de madera, permititán contemplar, en otros momentos, las aves que pasen por aqui,  ya que se ve  hay una avifauna muy completita.

Por cierto, en el pueblo de Estaña destaca una de las casas que ha debido acabar con la pintura azul de la zona.


Los hermanos Marzo, que conocimos en Caserras y de los que luego hablaré, nos informaron de que, antiguamente, cerca de Caserras, había una mina de azulete. Pues bien, o el dueño de la casa, o el pintor, son los auténticos herederos de la mina. Jo que abuso de color!!!

Monte bajo, chinebros, coscojas, buchos, y nos vamos acercando a una grandiosa explotación ganadera. Dos mastines salen a recibirnos, ladrando como solo ellos suelen. Ignoran que sabemos que en el fondo son "buena gente" así que cuando se dan cuenta que no nos asustan, dejan los ladridos.

Y de pronto ¡Tachaaaaan! Caserras del Castillo.

Estamos advertidos de que cruzar y transitar por el pueblo es prácticamente imposible, así que  unos 400 metros antes de llegar, donde existe una construcción que los antiguos habitantes de Caserras utilizan para celebrar la fiesta (Ultimo sábado de Agosto), debemos tomar una especie de sendero que, con muchas penas y utilizando profusamente la bendita podadora que siempre llevamos, nos dejara en la parte alta del pueblo, en lo que debió ser su castillo y depósito de agua. 




Podando, con el culo a rastras y, en definitiva como podemos, conseguimos llegar a la torre del castillo, posteriormente convertida en campanario exterior.

Los tres maestros que cito al principio, describen la iglesia minuciosamente. Parece mentira que una ruina como esta, haya despertado tantas inquietudes. Hay que tener mucha moral y la piel bastante dura para visitarla hoy en día.

Prometo hacer una oda a mi querida podadera, que tanto nos ayuda.















Tras "visitar" el pueblo, decidimos acercarnos a una colina que queda frente a nosotros. Desde allí podremos hacer fotos de todo el conjunto.

En ese momento, es cuando una vez mas comprobamos que el dios de los andariegos está con nosotros. Nos topamos con los Hermanos Marzo.

Fueron moradores de Caserras, y fueron a vivir a Benabarre cuando el pueblo se abandonó.

Mantienen un agradable refugio con vistas a la que fue su antigua casa, y al que van cuando les apetece con las excusas mas peregrinas. Se han construido un gran hogar, y hoy tienen previsto comer allí.

Son verdaderos mantenedores de la memoria, y nos explican todo lo relativo al pueblo, historia, formas de vida, negocios abiertos, conducciones de agua.

Incluso nos acompañan a la zona desde la que queríamos hacer fotos.











Nos enseñan, y dejan fotografiar una que tienen antigua, de cuando el pueblo estaba vivo.

Hacemos comparación con la situación actual.

En fin, un buen rato de compañía agradabilísima que nos trasladó vivencias e informaciones muy interesantes.

Tambien nos cuentan que actualmente el pueblo lo utiliza la Guardia Civil y algunos grupos de bomberos para hacer practicas de rescate en catástrofes, utilizando perros especialmente entrenados. He encontrado este curioso video.



Una última vista a Caserras, o mejor ¡Hasta otra ocasión!


Y ya, con un regusto nostálgico y extraño, retornamos a casa.

El montsec, nos da referencia del excepcional lugar en que nos encontramos.



Volviendo por Benabarre, paramos un momento para dar un paseo por el pueblo, y visitar el castillo.



Animando a que tol mundo vaya al monte, pongo la ruta 


Ala pues, saludos a la gente güena

1 comentario:

Cristian Laglera dijo...

Si señor, magnífico reportaje.
Me alegra mucho que te gustara, era una apuesta segura.

Un abrazo.