Portiello y Peña Buitrera

Si quieres pasar una jornada de monte, rodead@ de belleza por todas partes, oyendo todos los silencios, y con la casi seguridad de no ver a nadie. Este es el sitio.

La Sierra Portiello (junto con la de Picardiello), son las que separan los valles del Basa y del Guarga.

Sus cumbres mas significativas son El Portiello y la Peña Buitrera. así que...... vamos a ello.

San Julián de Basa, un mini-núcleo perteneciente a Yebra. En algún sitio he leído que tiene 9 habitantes. ¡los vi a todos!, incluso creo que con algún invitado.

A lo que vamos, que me enrollo. Lo primero que hay que hacer, después de aparcar, es cruzar el río Basa. ¡Menudo año llevamos!, así que esta vez no me pillan.

Unas preciosas chanclas de un par de euros, y que casi no pesan, siempre irán en el fondo de mi mochila.

Hasta da gustito mojarse de esta manera, y no las barbaridades que he tenido que sufrir en este año de tantas aguas.

Barranco de Ballarín hacia arriba, Una preciosa pista, se convierte en senda al llegar a la Ermita de Ballarín.
Restaurada hace poco tiempo, y curiosamente SIN TECHO.
Menos problemas de mantenimiento

Acabo de recibir la aportación de un colega bloguero, que me dice que esta Ermita se llama Santa María de Ballarán, y que tiene una larga historia en la que se ve incluso implicado el Santo Grial. Seguire informando porque este asunto tendrá futuro.

Se sube siguiendo el cauce del propio barranco. Hay que cruzarlo CUATRO veces.
Alguna piedra pasadera nos ayuda, y cuando haya  menos caudal, seguro que se cruza bien.

En mas o menos hora y media, se llega al collado que nos separa de la Guarguera.

Allí nuestra madre nos saluda con todo su esplendor. Pocas veces tenemos esta perspectiva tan rotunda de todo el cordal.

Un cortafuegos, a la izquierda, nos invita a subir hasta Peña Buitrera. El cortafuegos, cómodo a pesar de estar invadido por el erizón, nos acerca a la cumbre. Los últimos metros campo a través, pero sin dificultad ninguna. Arriba, como siempre la vista es excepcional. Una modesta cumbre pero que compensa sobradamente. Al oeste, Peña Cancias

 
Por el norte, como es preceptivo El Pirineo. Por cierto, parece que el dia era algo nublado, pero, en absoluto, se estaba estupendamente.



Vuelta al collado, y a subir al Portiello. Se va viendo siempre la cumbre, e incluso la vida de acceso. Seguimos el mismo cortafuegos unos metros. Se llega a una especie de segundo collado, y desde aquí, con ganas y decisión "parriba". No hay senda, el suelo es una alfombra de erizones, pero se puede caminar perfectamente. Otra cosa será cuando te quites las botas ¡Lo que saldrá de dentro!.

Paciencia e ir subiendo. Cada muchísimo parece que hay un mojoncillo, pero nada. solo la intuición y las ganas nos llevan a la cumbre (media hora desde el collado)

En este caso estamos hablando de un Vértice Geodésico. Con su pichorro y todo.

Ya es hora de comer, así que, a mirar, disfrutar y comer.

 

Mirar: Oroel y las peñas de San Juan de la idem, con el Cuculo a la derecha. También una perspectiva algo distinta a la que estamos acostumbrados.


 

                                                                                                                                                                                                Y, naturalmente el Pirineo

En este momento, y después de comer muy agradablemente, es cuando habrá que demostrar el sentido común del que suscribe. Y si le funcionan bien las (pocas) meninges que le quedan. Definitivamente, creo que tengo la cabeza para separar las orejas, porque lo correcto hubiese sido desandar lo andado, llegar al collado que separa las dos cuencas, y por la agradabilísima senda de subida, volver a bajar.

Mi puñetera manía de hacer excursiones circulares, me llevan a bajar por la cara oeste del Portiello, en busca de la GR16, que conozco, por haberla seguido con Rosa durante muchos kilómetros, en nuestra famosa "aventura del Grial".  Se que esta senda, me llevará a Yebra de Basa.

Mas que bajar por la cara Oeste, hay que tirarse. El GPS me informó despues que en unos 700 metros de recorrido, había bajado casi 300. Sin ningún camino o senda, ni hito que indicara nada, agarrado literalmente a algún árbol para poder bajar. Divertido pero.........

Nunca creí que besaría con tanta devoción una pintura roji/blanca que marca la GR16. Lo hice, porque me había llevado una alegría tremenda al encontrarla.

Para poco mas da de si la excursión. GR16, al principio senda agradable, que se convierte en pista algo peñazo. Por cierto, las salvajes lluvias de este año han hecho bastantes destrozos:

Esto era "pista"

Al llegar al desvio hacia Yebra, 3 kilómetros de carretera para recoger el coche que está en San Julian, en donde me esperan unos amigos:

Que conejar mas majo.

Repito que hacer la excursión circular implica: Bajada jorobada, un poco de senda majeta, pero: Pista peñazo hasta Yebra, y carretera hasta San Julian.

No obstante, he puesto el trak pa por si acaso.